Centro Lasaitze

La salud es lo primero! Pero... para tener salud, la estructura de nuestro cuerpo tiene que estar en equilibrio y el tejido blando flexible. 

 

 

Osteopatia global: estructural, visceral, pediatrica, craneo sacral...

 

            La Osteopatía, es una terapia manual, que se puede definir bien en dos palabras: tacto y sensibilidad.  Cuya finalidad, siempre partiendo de un enfoque global, es restaurar en la persona las movilidades tisulares y el equilibrio funcional que muchas veces se pierden por diversas razones. Estimulando así las fuerzas auto-curativas naturales del  cuerpo. 

            Su contenido científico, comprende los conocimientos biológicos, conductuales, químicos, físicos y espirituales relacionados con el mantenimiento y el restablecimiento de la salud. Así como la identificación,  la prevención, la curación y el alivio de la enfermedad. 

            La Osteopatía, es pues, un acercamiento a la persona como ejemplar único.  A través del uso exclusivo de las manos de la osteópata, ésta buscará los desequilibrios psicofisiológicos. Considerando a la persona como un todo indivisible. Es decir, si hay un dolor o sufrimiento (síntoma), no es algo aislado, sino el resultado de un desequilibrio global del cuerpo (causa). En otras palabras: no es el tobillo, la columna lumbar o nuestro estomago lo unico que vamos a valorar, sino a la persona en su conjunto.

           Es decir, para que uno tenga una buena vida, tiene que tener un buen movimiento en todas las partes de su cuerpo. Nos centramos en buscar las movilidades disminuidas o perdidas de cada persona, y restaurarlas a través de maniobras y técnicas muy sutiles. Una vez de llegar a éste punto, el siguiente trabajo es para el mecanismo de auto-reparación y regeneración de  cada persona, llegando a recuperar la buena salud en su globalidad. ¡¡CALIDAD DE VIDA!!                                               

           Según la fuerza de regeneración que tenga cada cuerpo y según cómo siga las recomendaciones de la osteópata,  mejorara: más, menos o, del todo.Para que el tratamiento osteopático sea duradero es necesario que cada persona aprenda a seguir ciertas pautas que ayuden a su cuerpo a mantener un equilibrio sano.

             Las causas de estos desequilibrios o bloqueos osteopáticos pueden ser varias: trauma físico o emocional, malas posturas, movimientos repetitivos etc. Estas limitaciones, que en un principio son locales (justo en una zona), a causa del mecanismo de auto-reparación de cada persona que busca volver al equilibrio, puede desajustar el sistema por completo añadiendo síntomas de diferente índole.

 

                                                                         

                                 Una de las funciones del cuerpo, es compensar y buscar el equilibrio 

                                                                 FOTO 1: Posición normal.

                            FOTO 2, 3 y 4: Adaptaciones que hace nuestro cuerpo, a partir de

                                disminuciones de movilidad periféricas provocadas por lesiones

                                       osteopaticas.

 

 

               Nuestro cuerpo tiene los elementos necesarios para un correcto funcionamiento, pero puede verse dificultado por diferentes situaciones que   atendidas a tiempo pueden ser fáciles de restaurar. 

               Nuestra meta final como osteópatas, es permitir que el paciente encuentre la armonía en todos los aspectos que manejan su equilibrio:estructura-función, neurológico, vascular-respiratorio, biomecánica, bio-psicosocial y bioenergética. Ayudando a la persona a mejorar partiendo de cualquier estado de enfermedad y partiendo de cualquier edad. Siendo beneficioso desde recien nacidos, niños, adolescentes y adultos, hasta para personas de edad muy avanzada. Pero en especial, queremos haceros ver, lo conveniente que es valorar este aspecto durante la edad de crecimiento.

Osteopatia pediátrica

               Los bebés y niños tambien sufren dolores de; cabeza, articulares, viscerales, etc. al igual que; se estresan, se deprimen, etc. En definitiva, pueden padecer casi las mismas patologías que los adultos. El único problema radica en que, los bebés y niños no hablan y no pueden quejarse o, no pueden explicarse como los adultos. Por lo que, “simplemente” lloran, no duermen bien, regurgitan, no comen, vomitan, padecen mucosidades, alergias, afecciones respiratorias, estan continuamente moviendose o el extremo contrario (son muy parados), etc.

               Toda persona relacionada con el cuidado de los niños debería saber que, 9 de cada 10 bebés que nacen, padecen patologías susceptibles de ser tratados por un osteópata cualificado. Patologías que de ignorarse, van a marcar la infancia, adolescencia y etapa adulta de este ser vivo, tan ignorado habitualmente.

               Es importante remarcar que, la inmensa mayoría de las patologías que padecen los adultos, son secuelas de, patologías sufridas durante la niñez (no tratados adecuadamente), que alteraron su equilibrio y su posterior desarrollo Y FORTALECIMIENTO DE DICHA ZONA.

              Si la persona se encuentra globalmente en equilibrio, y todas sus estructuras se mueven con normalidad (sin restricciones), el organismo ejercerá adecuadamente sus funciones. Lo dice la Ley de Crecimiento (Ley de Delpeche): Todos sabemos que el hueso se construye! pero lo que muchos pueden no saber es que, el crecimiento o construcción de éste, depende o se hace, en función de las reparticiones de presión que se ejercen sobre el cartílago. El cartílago que sufre más presión, por una falta de equilibrio estructural crece más lento, o directamente puede no crecer. Por lo que, al terminar la fase de crecimiento, puede quedar esa zona más corta que la contraria. Si la que queda corta es un brazo por ejemplo, puede ser un mal menor. Pero.. ¿que pasaría si la que queda corta es una extremidad inferior? que la columna vertebral y la pelvis para estar saludables, necesitarian que dicha persona que ya es adulta tenga que usar alza equilibratoria durante toda su vida..